Existía una difícil situación del pueblo que estaba sumergido en la ignorancia y la opresión, los disturbios y sediciones, el engaño, la hipocresía y la existencia de leyes opresivas, profundas divisiones de clase, guerras tribales, prejuicios erróneos, hábitos y costumbres incorrectas y malos tratos a las mujeres; por lo tanto, el Sagrado Corán describe la situación de esa época con como una clara desviación y se la menciona en las fuentes islámicas como los días de la ignorancia.
En la Península Arábiga, la gente estaba dividida por dogmas y creencias religiosas. La creencia más común de los árabes era la idolatría, era tan popular entre los árabes que el número de ídolos aumentó rápidamente y se instalaron y mantuvieron hasta 360 ídolos en la Kaaba. Además, el paganismo, el judaísmo, el cristianismo y el dualismo eran religiones comunes entre los árabes de esa época.
Después de la ascensión de Jesús al cielo, durante unos 600 años no se envió ningún profeta para guiar a la humanidad. Habían pasado muchos años desde que el pueblo, que, por su lejanía a las costumbres proféticas estaba sumergido en el desvío y la corrupción. No tenía resguardada su vida, ni seguridad económica ni honor. La desfavorable sombra de la ignorancia y el fanatismo había abarcado todas partes.
La opresión, la crueldad, la terquedad y todo tipo de crímenes horribles habían corrompido a todos, de tal manera que los minaretes de la guía quedaron viejos y gastados y se alzaron las banderas del desvío y la miseria.
El Imam Ali (P) dijo: "Dios dispuso a Su Mensajero entre la gente y lo envió para pedirles que cumplieran el pacto de la naturaleza que habían hecho con su Señor, para recordarles la bendición olvidada y para difundir el deber de la misión profética con razones claras; asimismo para motivar y vivificar los instintos de las personas que estaban ocultos bajo la incredulidad, el politeísmo y el desvío, y así poder mostrarles los magnánimos versículos divinos”
Dios Todopoderoso envió al Profeta Muhammad (P) para guiar a la humanidad y cumplir con lo que se había decretado. Dios inspiró la verdad al Sello de los Profetas (P) para liberar a sus siervos de la falsa adoración de los ídolos, guiarlos, salvarlos de seguir a satanás y encaminarlos a la obediencia divina. Entonces Dios Todopoderoso iluminó la oscuridad con la luz de Muhammad (P), purificó los corazones de la incredulidad y apartó las cortinas que habían caído sobre sus creencias.
El Sagrado Corán detalla varios propósitos al explicar el motivo de la misión profética, que incluyen: Recitación de los versículos divinos, purificación de la población, aprendizaje del Libro (sagrado) y sabiduría, establecimiento de la justicia, sacar a la gente desde las tinieblas a la luz, enseñar lo que el ser humano hasta ese momento estuvo privado, levantar las pesadas cargas y cadenas del cautiverio, anunciación y advertencia y misericordia para los seres humanos.
A pesar de la referencia del Corán a los diversos propósitos, El Santo Profeta (P) resumió el motivo de su misión en completar las virtudes morales y declaró: “El motivo de la misión profética es para perfeccionar mis virtudes morales”
Si bien cada profeta ha sido una manifestación de una buena moral, el Profeta Muhammad (P) ha incluido una expresión integral de la excelencia moral y la ejecución de todas las virtudes como el objetivo de su misión. La moralidad deseada por el Profeta (P) abarca todos los aspectos de la existencia humana, la felicidad y la excelencia. Abordar la ética e introducirla como único fin de la profecía es, de hecho, incluir la trascendencia de todos los aspectos de la existencia.
El Imam Jomeini establece este asunto de la siguiente manera: “El motivo de la misión profética es la manifestación y revelación del Corán, el objetivo de la recitación del Corán es purificar a los seres humanos de la oscuridad que existe en ellos, una vez listos sus almas y mentes pueden entender el libro y la sabiduría. La finalidad de la misión profética es salvarnos de estas rebeliones, nos desarrollemos y purifiquemos”
El monoteísmo es el mensaje principal y más importante de la misión profética. El estudio de este principio es tan extenso que el Islam es conocido como la religión del monoteísmo. En el Sagrado Corán, el principio del monoteísmo es la estructura general de todos los versículos, y el primer mensaje de todos los profetas anteriores fue el monoteísmo: Y no hemos enviado antes de ti a ningún Mensajero sin haberle revelado: «No hay más dios que Yo, así pues, ¡Adoradme!» (Sura Los Profetas: 25)
Por otro lado, el monoteísmo no fue la única solución a las crisis de la era preislámica. El monoteísmo no es un simple lema. El monoteísmo significa odio, distancia y negación a todos los ídolos, representa el no depender de ningún poder excepto el poder y la grandeza de Dios.
Con esta descripción, el ser humano del siglo XXI necesita más que nunca este principio vital. Los seres humanos de hoy, con sus ídolos internos y externos, se han visto privados de todo progreso y felicidad reales. El monoteísmo significa no aceptar ninguna injusticia. Sin embargo, el comportamiento humano desde lo más personal hasta la legislación para el gobierno mundial, es una oportunidad para emplear el principio del monoteísmo. Sin el monoteísmo y sin la lucha contra las potencias extranjeras, la civilización actual no sólo será inútil, sino que multiplicará la tasa de su decaimiento.
También puede leer:
Existía una difícil situación del pueblo que estaba sumergido en la ignorancia y la opresión, los disturbios y sediciones, el engaño, la hipocresía y la existencia de leyes opresivas, profundas divisiones de clase, guerras tribales, prejuicios erróneos, hábitos y costumbres incorrectas y malos tratos a las mujeres; por lo tanto, el Sagrado Corán describe la situación de esa época con como una clara desviación y se la menciona en las fuentes islámicas como los días de la ignorancia.
En la Península Arábiga, la gente estaba dividida por dogmas y creencias religiosas. La creencia más común de los árabes era la idolatría, era tan popular entre los árabes que el número de ídolos aumentó rápidamente y se instalaron y mantuvieron hasta 360 ídolos en la Kaaba. Además, el paganismo, el judaísmo, el cristianismo y el dualismo eran religiones comunes entre los árabes de esa época.
Después de la ascensión de Jesús al cielo, durante unos 600 años no se envió ningún profeta para guiar a la humanidad. Habían pasado muchos años desde que el pueblo, que, por su lejanía a las costumbres proféticas estaba sumergido en el desvío y la corrupción. No tenía resguardada su vida, ni seguridad económica ni honor. La desfavorable sombra de la ignorancia y el fanatismo había abarcado todas partes.
La opresión, la crueldad, la terquedad y todo tipo de crímenes horribles habían corrompido a todos, de tal manera que los minaretes de la guía quedaron viejos y gastados y se alzaron las banderas del desvío y la miseria.
El Príncipe de los Creyentes (P) dijo: "Dios dispuso a Su Mensajero entre la gente y lo envió para pedirles que cumplieran el pacto de la naturaleza que habían hecho con su Señor, para recordarles la bendición olvidada y para difundir el deber de la misión profética con razones claras; asimismo para motivar y vivificar los instintos de las personas que estaban ocultos bajo la incredulidad, el politeísmo y el desvío, y así poder mostrarles los magnánimos versículos divinos”
Dios Todopoderoso envió al Profeta Muhammad (PB) para guiar a la humanidad y cumplir con lo que se había decretado. Dios inspiró la verdad al Sello de los Profetas (PB) para liberar a sus siervos de la falsa adoración de los ídolos, guiarlos, salvarlos de seguir a satanás y encaminarlos a la obediencia divina. Entonces Dios Todopoderoso iluminó la oscuridad con la luz de Muhammad (P), purificó los corazones de la incredulidad y apartó las cortinas que habían caído sobre sus creencias.
El Sagrado Corán detalla varios propósitos al explicar el motivo de la misión profética, que incluyen: Recitación de los versículos divinos, purificación de la población, aprendizaje del Libro (sagrado) y sabiduría, establecimiento de la justicia, sacar a la gente desde las tinieblas a la luz, enseñar lo que el ser humano hasta ese momento estuvo privado, levantar las pesadas cargas y cadenas del cautiverio, anunciación y advertencia y misericordia para los seres humanos.
A pesar de la referencia del Corán a los diversos propósitos, El Santo Profeta (P) resumió el motivo de su misión en completar las virtudes morales y declaró: “El motivo de la misión profética es para perfeccionar mis virtudes morales”
Si bien cada profeta ha sido una manifestación de una buena moral, el Profeta Muhammad (P) ha incluido una expresión integral de la excelencia moral y la ejecución de todas las virtudes como el objetivo de su misión. La moralidad deseada por el Profeta (P) abarca todos los aspectos de la existencia humana, la felicidad y la excelencia. Abordar la ética e introducirla como único fin de la profecía es, de hecho, incluir la trascendencia de todos los aspectos de la existencia.
El Imam Jomeini establece este asunto de la siguiente manera: “El motivo de la misión profética es la manifestación y revelación del Corán, el objetivo de la recitación del Corán es purificar a los seres humanos de la oscuridad que existe en ellos, una vez listos sus almas y mentes pueden entender el libro y la sabiduría. La finalidad de la misión profética es salvarnos de estas rebeliones, nos desarrollemos y purifiquemos”
El monoteísmo es el mensaje principal y más importante de la misión profética. El estudio de este principio es tan extenso que el Islam es conocido como la religión del monoteísmo. En el Sagrado Corán, el principio del monoteísmo es la estructura general de todos los versículos, y el primer mensaje de todos los profetas anteriores fue el monoteísmo: Y no hemos enviado antes de ti a ningún Mensajero sin haberle revelado: «No hay más dios que Yo, así pues, ¡Adoradme!» (Sura Los Profetas: 25)
Por otro lado, el monoteísmo no fue la única solución a las crisis de la era preislámica. El monoteísmo no es un simple lema. El monoteísmo significa odio, distancia y negación a todos los ídolos, representa el no depender de ningún poder excepto el poder y la grandeza de Dios.
Con esta descripción, el ser humano del siglo XXI necesita más que nunca este principio vital. Los seres humanos de hoy, con sus ídolos internos y externos, se han visto privados de todo progreso y felicidad reales. El monoteísmo significa no aceptar ninguna injusticia. Sin embargo, el comportamiento humano desde lo más personal hasta la legislación para el gobierno mundial, es una oportunidad para emplear el principio del monoteísmo. Sin el monoteísmo y sin la lucha contra las potencias extranjeras, la civilización actual no sólo será inútil, sino que multiplicará la tasa de su decaimiento.
El Imam Jomeini dice al respecto: "La misión del Mensajero de Dios es explicar la forma de eliminar la opresión, la forma en que la gente puede enfrentarse a los grandes poderes. La misión es salvar la moral del pueblo y sus almas sumergidas en las tinieblas. Debe eliminar completamente la oscuridad y reemplazarla con luz, eliminar la ignorancia y actuar como una guía en su lugar, eliminar las tinieblas de la opresión y sustituirla por la justicia”
El Líder Supremo también considera la misión profética como un evento único en el mundo que tiene efectos duraderos en la vida y dice:
"El tema de la misión profética y el surgimiento de este suceso es lo más importante que le ocurrido durante la larga vida de la humanidad. En el destino del ser humano y la historia ningún evento ha sido tan eficaz como éste y no ha existido una gracia divina sobre los seres humanos como esta. Hoy, nuestra consigna en el mundo son los mismos mensajes y lemas de la misión profética, como la justicia social, libertad, ciencia y conocimiento, progreso y excelencia”.
También puede leer: Sucesos del Inicio de la Misión Profética del Mensajero de Dios (P)
El Imam Jomeini dice al respecto: "La misión del Mensajero de Dios es explicar la forma de eliminar la opresión, la forma en que la gente puede enfrentarse a los grandes poderes. La misión es salvar la moral del pueblo y sus almas sumergidas en las tinieblas. Debe eliminar completamente la oscuridad y reemplazarla con luz, eliminar la ignorancia y actuar como una guía en su lugar, eliminar las tinieblas de la opresión y sustituirla por la justicia”
El Líder Supremo también considera la misión profética como un evento único en el mundo que tiene efectos duraderos en la vida y dice:
"El tema de la misión profética y el surgimiento de este suceso es lo más importante que le ocurrido durante la larga vida de la humanidad. En el destino del ser humano y la historia ningún evento ha sido tan eficaz como éste y no ha existido una gracia divina sobre los seres humanos como esta. Hoy, nuestra consigna en el mundo son los mismos mensajes y lemas de la misión profética, como la justicia social, libertad, ciencia y conocimiento, progreso y excelencia”.
Su comentario