La perfección de la existencia se logra en la medida en que el ser humano implementa el Corán en su ser, razón por la cual se afirma en las narraciones que en el Día del Juicio se le dirá: Recita el Corán y asciende. Es decir, los niveles y grados del paraíso, que son los niveles de la verdadera perfección humana, corresponden a los versículos del Corán.
Por supuesto, es bueno que una persona recite el Corán todos los días y se beneficie de este, pero se recomienda que se lea al menos 50 versículos todos los días y todas las noches, reflexionar sobre cinco versículos leídos y por lo menos esforzarse por actuar en base a uno de ellos.
Ciertamente, es lo mínimo ya que Dios ha dicho en el Corán que se debe recitar tanto como pueda. Luego indicó que, las personas de acuerdo con sus circunstancias, como enfermedades, viajes y defensa en el camino de Dios, no pueden pasar mucho tiempo recitando el Corán, pueden recitarlo tanto como les sea posible. Sin embargo, en las narraciones se establece una lectura abundante. Una recitación completa del libro sagrado (recitación del Corán en su totalidad de principio a fin) toma al menos tres días, por lo cual la persona que lea más tiene mayor oportunidad de reflexionar.
Por otro lado, aunque recitar diariamente algunas suras, como Yasin, Waqi'ah, … tiene muy buenos efectos, se ha recomendado recitar el Corán desde el principio hasta el final, debido a que cada versículo es un tesoro que se debe alcanzar y todos tienen sus propias bendiciones.
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